viernes, 25 de junio de 2010


El principio de jerarquía

La palabra Jerarquía no está de moda. Trae a la memoria viejos tiempos de obediencia ciega y demasiada disciplina. Pero eso poco importa: una cosa es la jerarquía social mal entendida, y otra muy distinta la jerarquía perceptiva y de concepto, de la cual nos servimos para conocer mejor lo que nos rodea y para comunicarnos. La jerarquía, en términos de lógica visual, no es otra cosa que una manifestación de las relaciones que se producen entre las cosas que vemos y entre las cosas y nosotros mismos.






Tipos de jerarquías naturales y culturales:
Todo lo que nos rodea en sociedad está lleno de valores jerárquicos. Desde el semáforo que regula el tráfico al trato especial de que goza un jefe de gobierno.La naturaleza tampoco se libra de prioridades. Consideremos la forma de alimentación de los polluelos en el nido o el orden en la comida de un grupo de leones.Muchas de estas jerarquías se asocian a patrones visuales lógicos, que usamos sin apenas caer en la cuenta. Es lo que puede suceder al ceder el puesto en una mesa a la hora de comer o en la configuración que adoptamos cuando van a hacernos una fotografía.Veamos ahora algunos de estos elementos de lógica visual que afectan o son afectados por valores jerárquicos.












1. La jerarquía arriba / abajo:
Se manifiesta como la prioridad de lo superior en el espacio o en el plano, que presenta una conexión directa con lo superior en el orden de las ideas o en el orden moral.La imagen reproducida más abajo establece una jerarquía entre las letras que tiene una de sus bases más relevantes en su posición relativa superior / inferior.










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La letra M supera en visibilidad a las otras letras por el hecho de estar más alta y destacar.Para localizarla, el organismo gasta menor cantidad de energía. Su posición respecto los otros elementos le sirve de base de proyección.










2. Jerarquía grande / pequeño
Es una de las más utilizadas. En términos generales, abundan las situaciones en las que el valor de las cosas es proporcional a su tamaño físico, respecto de las cosas que hay a su alrededor. Un fenómeno que ya encontramos en el arte egipcio, en el que se nos muestran gigantescos faraones imperando sobre ejércitos de diminutas figurillas.









En la imagen superior, la letra F presenta ese dominio faraónico sobre el resto de las letras que la acompañan. Esa fuerza caracteriza el diseño y hace que éste sea leído en un orden determinado.









3. Jerarquía centrado / periférico
Esta jerarquía visual también es de las más utilizadas y ha sido denominada "fuerza del centro". Tiene su primer fundamento en la estructuración simétrica que presentan tantos seres y sucesos de la naturaleza. Una ley que captamos y proyectamos a numerosos hechos o cuestiones de trascendencia social.








En la imagen que presentamos, la línea central, a pesar de su menor tamaño, adquiere una fuerza extra a causa de la situación que ocupa. De la misma manera, una persona que ocupa el centro de una mesa presidencial en un acto social, toma para sí ese factor de jerarquía visual.









4. Jerarquía de lo contrastado
Este tipo de jerarquía visual actúa mediante un juego de choque perceptivo. Aquello que contrasta salta hacia nosotros sin necesidad de que nosotros vayamos hacia él. Su primitivo fundamento es el de un acto de defensa, ligado a la exploración del medio en que nos movemos.









5. Jerarquía de lo separado frente a lo grupal.
Un viejo y desgastado chiste hacía decir a un vigilante en un fuerte del oeste americano: "¡vienen dos mil tres indios!". A la pregunta de cómo lo sabía, su respuesta era: "porque delante vienen tres y luego unos dos mil".Ciertamente, eso es lo que sucede en nuestra percepción: vemos lo separado y después el grupo. O si se prefiere, los grupos tienden a formar unidades de mayor nivel: tres árboles y un bosque.
En la imagen reproducida aquí arriba la letra h se beneficia de esa situación y salta hacia el espectador como un elemento con valor en sí mismo. El resto es "un" bloque, pero su complejidad formal requiere de nosotros mucho más tiempo de atención, que no siempre estaremos dispuestos a dar.









6. Jerarquía de lo brillante
En términos generales, todo aquello que irradia ha sido valorado por las más diversas culturas: desde el oro hasta los atributos iconográficos de la santidad, con sus aureolas luminiscentes.Toda radiación tiene fuerza visual. Y casi toda fuerza visual puede traducirse en fuerza física.
A pesar de la baja calidad de las imágenes en la red y del motivo general que llena toda la fotografía, se puede apreciar cómo la zona con mayor brillo llama nuestra atención a pesar de no tener un contenido particularmente importante en el contexto de la imagen.






Tipos de anomalía perceptiva




Existen numerosos tipos de anomalías, aunque pueden resumirse en tres grandes bloques:
Anomalías semánticas
Anomalías formales
Anomalías cromáticas
Las primeras atañen a variaciones o cambios en el significado de lo que vemos. En la imagen tenemos un ejemplo pedagógico, que también incluye aspectos formales y cromáticos.










Como el significado es uno de los atributos más poderosos de las imágenes, una anomalía en algo que le afecte, puede alterar el aspecto jerárquico de la percepción de manera imprevisible.El segundo tipo de anomalía, la de carácter formal, se refiere a variaciones imprevistas experimentadas en la forma.






En la imagen, el cuadrado establece una ley de formación, dentro de la cual el círculo es una entidad anómala, que por ello mismo reclama una mayor dosis de atención.El tercer tipo de anomalía se refiere a cambios que afectan al color.




Como se aprecia, todas ellas generan notables efectos de jerarquía en el diseño, por lo que su uso es muy recomendable, por ejemplo, para guiar la lectura del espectador, estructurando y secuenciando la información que recibe.A continuación pasaremos a comentar diez imágenes, relacionadas con la aplicación del principio de jerarquía en el diseño y el arte